"La tropa de Vélez-Málaga llegó a Marbella el día 27 a las ocho de la noche bajo el azote de un fuerte temporal de lluvia, tras haber hecho un recorrido a pie de 23 Km Estaba compuesta por dos patrullas, banda de tambores... La tropa de Marbella salió a esperar a sus compañeros de Vélez hasta el vecino pueblo de Ojén acudiendo dos patrullas y banda de cornetes con su jefe Federico Lozano e instructores Lozano y Palma y los miembros del comité Juan Robledano y Juan Domínguez. Emocionante fue el momento del encuentro de las dos tropas; no cesaron de dar vivas. Y a todo esto diluviando".
Parte de la historia se construye a golpe de acontecimiento y aquel 27 de noviembre de 1915 quedó borrado de las crónicas marbellenses, diluido por la tromba de agua que mojó el papel de la memoria y emborronó efemérides, que ahora son restauradas y ofrecidas con la intención de reflexionar sobre lo que sabemos de nuestro pasado, cómo la hemos reconstruido acumulando piezas de un puzzle incompleto y también hasta que punto podemos creer lo que nos han contado de nuestro pasado a veces por medio de interesadas y oficiales opiniones, acompañadas de ominosos silencios.
Parte de la historia se construye a golpe de acontecimiento y aquel 27 de noviembre de 1915 quedó borrado de las crónicas marbellenses, diluido por la tromba de agua que mojó el papel de la memoria y emborronó efemérides, que ahora son restauradas y ofrecidas con la intención de reflexionar sobre lo que sabemos de nuestro pasado, cómo la hemos reconstruido acumulando piezas de un puzzle incompleto y también hasta que punto podemos creer lo que nos han contado de nuestro pasado a veces por medio de interesadas y oficiales opiniones, acompañadas de ominosos silencios.
No es un relato sobre el movimiento de tropas durante una guerra, aunque de lo leído puede desprenderse un aroma bélico, fue con motivo de la primera promesa de la tropa de Marbella del movimiento escultista, más conocido como scouts o boy scouts. Habían invitado a todos los exploradores de la provincia pero asistieron pocos, como es narrado por Francisco José Armada Muñoz en el libro "El escultismo andaluz". "A la entrada de Marbella y aunque caía un horroroso chaparrón, eran esperados por todo el pueblo en masa y por el comité local, José Lorenzo, Félix de Zea, Eugenio Cid, Antonio Pérez, Ignacio Nieto, Manuel Martín y Eugenio Lima. Cuando llegaron a la plaza de la Constitución fueron saludados por el sr. alcalde D. Enrique Belón y demás autoridades, pasando acto seguido a la sala capitular, donde con frases cariñosas el alcalde dio la bienvenida a los huéspedes".
Eran jóvenes imberbes, que formaban parte de un extraño y poco comprendido grupo civil con ínfulas militares, creado por el británico Robert Baden-Powell, que preconizaba el desarrollo físico, mental y espiritual para que pudieran adquirir la condición de “buenos ciudadanos”. Una suerte de actividad lúdica aderezada de reglas castrenses y ceremonias religiosas que en Marbella alcanzó cierta importancia sobre todo gracias al impulso dado en los años veinte por Enrique del Castillo y Pez. De hecho, la celebración del día de San Jorge de 1922 mide su implantación en la ciudad: "Después de una diana floreada, se dirigieron a la iglesia parroquial, donde se ofició una misa por el sacerdote José García Morán. A las diez, la tropa en pleno fue obsequiada por los hermanos mayores de todas las cofradías de la ciudad, que les ofrecieron un espléndido almuerzo en el restaurante Cuevas. Por la tarde y con asistencia de numeroso público tuvo efecto un soberbio festival en la plaza de toros, con el siguiente programa: presentación y objeto de la fiesta, ejercicios colectivos de gimnasia, la comedia en un acto Redención, Recitación de poesías, ejercicios colectivos de semáforos, evoluciones y apoteosis por la tropa en pleno, himno de la institución. Por la noche se organizó una magnífica verbena y velada musical, retreta por la banda, simulacro de combate y finalmente danzas escultistas".
Eran jóvenes imberbes, que formaban parte de un extraño y poco comprendido grupo civil con ínfulas militares, creado por el británico Robert Baden-Powell, que preconizaba el desarrollo físico, mental y espiritual para que pudieran adquirir la condición de “buenos ciudadanos”. Una suerte de actividad lúdica aderezada de reglas castrenses y ceremonias religiosas que en Marbella alcanzó cierta importancia sobre todo gracias al impulso dado en los años veinte por Enrique del Castillo y Pez. De hecho, la celebración del día de San Jorge de 1922 mide su implantación en la ciudad: "Después de una diana floreada, se dirigieron a la iglesia parroquial, donde se ofició una misa por el sacerdote José García Morán. A las diez, la tropa en pleno fue obsequiada por los hermanos mayores de todas las cofradías de la ciudad, que les ofrecieron un espléndido almuerzo en el restaurante Cuevas. Por la tarde y con asistencia de numeroso público tuvo efecto un soberbio festival en la plaza de toros, con el siguiente programa: presentación y objeto de la fiesta, ejercicios colectivos de gimnasia, la comedia en un acto Redención, Recitación de poesías, ejercicios colectivos de semáforos, evoluciones y apoteosis por la tropa en pleno, himno de la institución. Por la noche se organizó una magnífica verbena y velada musical, retreta por la banda, simulacro de combate y finalmente danzas escultistas".
El régimen de Franco suspendió en 1940 sus actividades. Consideraban, según la Orden que “sus Estatutos se hallan embebidos, aunque con desviaciones en su orientación, en las Organizaciones Juveniles de F.E.T. y de las J.O.N.S., que dedican sus actividades a la formación y exaltación de la unidad del espíritu nacional, mediante la educación moral, física, patriótica y premilitar, basada en los Principios Nacional Sindicalistas”. La historiografía franquista sepultaba su recuerdo en clandestinos cajones. Con su prohibición llegaba el silencio, la postergación de su memoria a páginas menores. El Frente de Juventudes y después la O.J.E. coparon apoyos, parabienes y protagonismos sin masones, mientras el movimiento scout era adoptado por la iglesia, bajo condiciones bien diferentes a las de su creación.
"Terminada la ceremonia, ya por la tarde, todos los invitados al acto de la promesa, fueron agasajados en casa de la madrina de la bandera, doña Manuela Domínguez de Roldán, con dulces, licores y habanos. El pueblo de Marbella mostró su mayor entusiasmo".
"Terminada la ceremonia, ya por la tarde, todos los invitados al acto de la promesa, fueron agasajados en casa de la madrina de la bandera, doña Manuela Domínguez de Roldán, con dulces, licores y habanos. El pueblo de Marbella mostró su mayor entusiasmo".
hay algun sito en concreto de marbella donde se haga esto
ResponderEliminarcreo que no, que no existe tropa de scouts en Marbella. Alguna vez los he visto pero venían de fuera.
ResponderEliminarHola. Yo fui scout pero de Málaga en un grupo ya desaparecido de los Scouts de España: el 282 Mediterráneo.
ResponderEliminarRecuerdo que, al menos en una ocasión, se celebró el San Jorge en el Vigil de Quiñones. Este San Jorge era una concentración a nivel provincial de todos los Scouts. Que yo me acuerde, no había grupo de los Scouts de España en Marbella. No se si otras asociaciones de Scouts (Movimiento Scout Catolico), tenía grupo. Un saludo
¿Sabías que en Marbella hay un grupo scout para chicos y chicas? Infórmate en http://www.scouts-de-europa.org/grupos/santateresa/
ResponderEliminarNo entiendo como se puede decir que fueron prohibidos cuando hay al alcance de cualquiera en la red vídeos de los Scouts rindiendo pleitesía al Caudillo.
ResponderEliminarY el que lo dude, minuto 7:35 de este por ejemplo:
https://www.youtube.com/watch?v=UMPjJEzWKUs
Su actividad fue suspendida en 1940 por Decreto de 22 de abril. En los años 50 se toleró de nuevo su actividad pero bajo supervisión de la iglesia
ResponderEliminarhttps://www.facebook.com/groups/proyecto.siempreadelante/permalink/1011123072333448/
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